Ingredientes:
Para la masa (fácil y rápida):
250 grs. de harina
5 cucharadas de aceite
Una taza (de las de café) casi llena de agua
Una pizca de sal
En un recipiente hondo (ensaladera), echar la harina, hacer un hueco en medio y echar en él la sal, el aceite y el agua. Amasar con la punta de los dedos, muy ligeramente. En cuanto la mezcla sea homogénea, formar una bola y utilizar casi enseguida. Si la masa se quedara demasiado seca, se puede añadir, con mucho cuidado en cuanto a cantidad, un poco de aceite o de agua. Si, al contrario, estuviera demasiado blanda, se le echaría un poco de harina.
Para el relleno:
4 huevos
2 lonchas algo gruesas de bacon ahumado
Unos 125 gramos de jamón de York en lonchas algo recias (en todo caso, no demasiado finas)
Un brick de nata fresca (de los más pequeños)
Unos 50 grs. de gruyère rallado (o de Emmental).
Sal y pimienta
Preparación
Poner el horno a calentar (10 o 15 minutos antes de meter la quiche) a fuego de mediano a fuerte. (Aproximadamente 170 grados o al 7 si el termostato es de 1 a 10)
Untar un molde de tarta con un trocito de mantequilla (o aceite). Pasar la masa por el rodillo, de modo a darle la forma y dimensiones del molde. Extenderla por el molde.
Cortar el bacon en trocitos, quitándole la orilla. Igualmente, cortar el jamón de York a trocitos. Calentar un poco de aceite de oliva (una o dos cucharadas) en una sartén y rehogar el bacon hasta que esté dorado. Retirarlo y repartirlo encima de la masa. En el mismo aceite, rehogar el jamón, dándole sólo un par de vueltas y repartirlo encima de la masa.
En un recipiente hondo, cascar los huevos, salpimentar al gusto, (conviene salar poco, ya que el bacon, el jamón y el gruyère son salados)
Añadir la nata y el gruyère y batir como para tortilla. Echar esta mezcla en el molde; meter en el horno durante unos veinticinco minutos. Vigilar, procurando no abrir el horno, que no se queme la superficie. Si eso ocurriera, cubrir la quiche con un papel de aluminio hasta que se acabe de hacer. Sacar del horno. Se puede consumir caliente, tibia o fría, al día siguiente....
¡BUEN PROVECHO!
*Ningún ingrediente es absolutamente necesario: se puede sustituir la nata por leche, o se puede no echar queso...pero la quiche estará menos "mullida" o menos sabrosa.
También se pueden variar los ingredientes, sustituyendo el bacon y el jamón por la parte blanca de unos puerros rehogados en un poco de aceite hasta que estén tiernos. Entonces, se obtiene una "flamique picarde".